sábado, 25 de agosto de 2012

foto compocicon en fotografia

La Ley del Horizonte indica que en el recuadro fotográfico deben trazarse, imaginariamente y con una afinidad, tres líneas horizontales de igual anchura, tanto si se esta trabajando en posición horizontal o vertical, y en la gran mayoría de las ocasiones, darle alrededor de dos bandas a la zona donde se encuentra el motivo principal, y más o menos una banda a la zona secundaria.

Generalmente, la amplitud de ambos espacios dependerá de la mayor o menor importancia de cada uno de estos, pudiendo ser casi iguales si la relación entre el motivo principal y el secundario no es tan desequilibrado nuestro fotograma, hasta reducirse la zona secundaria a solo un pequeño borde si el motivo principal es muy destacado.


Es importante destacar, que esta regla no solo se aplica cuando esta presente el horizonte, sino en toda imagen que tenga una línea más o menos horizontal que divida a la composición en dos espacios significativamente diferenciados.



LEY DE TERCIOS:

La denominada regla de los tercios divide la escena en tres partes, tanto horizontal como verticalmente. Las líneas que determinan estos tercios se cortan en puntos estéticamente adecuados para situar el centro de interés, con lo que evitamos que éste, al estar situado en el centro de la imagen resulte estático.

La Ley de los Tercios: Se marca, en el recuadro fotográfico deben trazarse, imaginariamente, dos líneas equidistantes verticales y dos horizontales, siendo en torno a alguno de los cuatro puntos donde se cruzan las cuatro líneas, en donde debe colocarse el motivo que deseamos resaltar dentro de la composición.

Esto ocasiona un arreglo asimétrico de la imagen, con el polo de máximo interés visual encontrándose relativamente cerca de alguna de las cuatro esquinas del recuadro, y el área central de la gráfica ocupada por elementos secundarios.

Es posible y hasta recomendable, cuando se pueda hacer, cumplir las tres leyes de La Regla de Oro en una misma fotografía, pues estas no solo son perfectamente compatibles entre sí, sino también complementarias.
Según la división por tercios de una escena, la confluencia de los tercios marcan unos puntos donde se hacen llamativos los objetos, llamados puntos fuertes. El centro es un punto fuerte. Es recomendable hacer coincidir los objetos con estos puntos.

LEY DE LA MIRADA:
Es aquella ley en que toda persona, animal o cosa, dentro del recuadro fotográfico debe de tener más espacio libre hacia su parte frontal que lo que ocupa su parte trasera, independientemente de la amplitud de lo abarcado en el encuadre de la toma. Incluso podemos recortar el borde del recuadro fotográfico, la parte del elemento gráfico en cuestión por su parte posterior, si este se encuentra en un plano cercano a la cámara o es de dimensiones muy grandes.
Siguiendo la pauta de estas leyes, concederemos mas o menos espacio a nuestro objetivo principal, (el individuo, personaje o plano) según la importancia del campo que tengamos delante, siempre que sea directamente proporcional entre el valor de lo mostrado y el espacio que nos ocupa.

DIAGONALES:
Las líneas diagonales suelen funcionar muy bien a la hora de dirigir la mirada del espectador a través de la fotografía. Crean puntos de interés cuando se produce una intersección con otras líneas y generan profundidad en la imagen sugiriendo una perspectiva.
También pueden añadir una sensación de acción en la imagen y aportan un aspecto más dinámico.
Considera cómo puedes utilizar las diagonales para guiar el ojo al centro de interés principal de tu foto.
Existen diferentes estudios sobre cómo las personas ven las imágenes, y muchos de ellos afirman que el modo natural en el que se ve una imagen estrasladando la vista de izquierda a derecha, partiendo de la parte inferior izquierda a la parte superior derecha. Por ello, una diagonal que describa ese recorrido será muy útil y natural en nuestras fotos.
Por supuesto, no se trata de que dividamos en dos nuestras fotografías a través de esa diagonal. Podemos buscar formas y patrones en nuestro entorno que describan ese recorrido de un modo natural.
Otra opción es buscar, en lugar de una línea diagonal que cruce de una esquina a otra de la foto, una línea que parta de la zona central de la imagen y vaya a una de las esquinas.
Recuerda que distintas líneas apuntando en varias direcciones y cortando con otras líneas pueden añadir dinamismo y acción a tu foto, pero si el número de líneas es elevado pueden acabar creando confusión y caos.
Al igual que ocurre con las líneas horizontales y laslíneas verticales, una serie de líneas diagonales repetidas pueden ser en sí mismas el tema de la foto, creando patrones interesantes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario